flor de ti

Flor de ti
despojada mi alma
aroma en el aire...
no llega a mi.

No se cantar,
no se pintar,
solo se amar,
dos sin par,
no es amor.

cuando aún recuerdo

Cuando todavía te recuerdo
al mirarte y en mis sueños
duele... lloro... siento... recuerdo...
miedo a olvidar.

Me visto y me descalzo
como vienes y te vas

lo que esconde el alma

Mirada dice lo que esconde el alma...

las burbujas en el cielo progresan 

ahora  al verla nada trae calma

ya que todos saben que no regresan.

Huir al monte que nada has hecho

llorar lejos sin pronunciar su nombre.

Y a buenas penas en tristes noches...

de recuerdos y sueños

el  mundo está  hecho de mares y horizontes.

decir adios

Las lágrimas 

que no encuentras 

en el camino

las llevo conmigo,

mirar al frente

y se repiten 

las palabras...

beber tus labios

Como yo no beber de tus labios

si me desfallezco aún probándolos

en carne viva... es tuya mi habla 

carne habla... en la mía resbala...

Para ir a las estrellas solo hay dos 

caminos, y en ti logro alcanzarla.

La brisa para los desconocidos

bien desean poder abrazarla

en dulce noche donde nadie mira.

Y en la cara cae el agua clara,

no entres en mi puerta, está ocupada.

en la piel del verso

En la piel del verso que escribo

y las dedico con todo mi amor...

yo te canto las notas de mi arrobo...

y en mi alma el menos sincero dolor.

Se que mis gratas palabras oírme

vos no quisieras, y de interrumpirme

llorar y llorar... mojadas esquinas

que de ellas grandes espinas salidas.

Sangre en mis labios... quisieran besarte,

no es mi gran penuria el saber quererte,

las estrellas... larga y fina noche.

Por solo un día poder desvestirte

hoy, en mis sueños... siendo tuya... aceche,  

tu favorito color azabache.

¡clara, clara!

De la tierra, de su espina, del aire 

y del sol está despojada... árida.

Como horas comienzan el desaire,

rien...La llaman desagradecida.

Dicen...Deja pasar tiempo al olvido,

que el olvido no es más que un pasatiempo.

¡Y que pasatiempo esperar la muerte,

estar hilada a su maldita suerte!.

Del alma y sentirse muy vacía, 

entonces todo hombre y desprecia,

sus ambos ojos si miras y llora.

Dime...  Te diré de que carecía,

de todo, sin ser agua clara ¡clara!

de todo, sin ser agua clara ¡clara!.

déja

Déjate ya de zarandajas mujer...

no lo necesito ni de consuelo,

que de que me sirve tu falso querer...

sostenme ahora tu, el pobre pañuelo.

libertad

Entiendo el idioma

de los pájaros,

porque contigo vuelo...

somos libres.

siempre belleza

Dispárame en la cara...

Dime lo que tengas que decir

porque aún viniendo de ti

será suma belleza...

Y al menos ruego

desplaces mi cuerpo,

siempre que no actúe la fuerza.

Déjame una muerte dulce...